Marina Rodriguez
Qué es la personalidad:
Personalidad es el conjunto de características notables de una persona, es la fuerza activa que ayuda a determinar la relación de las personas en función de su patrón de individualidad personal y social, referido a pensar, sentir y actuar.
La personalidad es un término abstracto que se utiliza para describir y dar una explicación teórica del conjunto de peculiaridades de un individuo que lo caracterizan y diferencian de los demás.
La personalidad tiene varias facetas que se consideran parte integrante de ella, y que influyen en las actitudes de cada persona. La forma física puede influir en la autoestima, tanto positiva como negativamente, alterando el comportamiento y la percepción de la persona. El temperamento es responsable del comportamiento afectivo, la excitación y la atención.
La personalidad también está influenciada por la inteligencia y la creatividad donde, a través de ella, se es capaz de encontrar soluciones diferentes para las cosas, hay apertura a nuevas experiencias, presentando una competencia social, donde se muestra la capacidad de defender o imponer sus intereses y la capacidad de construir relaciones.
La personalidad está vinculada a la actitud de valores, la tendencia a juzgar como deseables o no determinados objetivos, como la libertad, o disposiciones de acción como la honestidad. Las personas que tienen una postura curiosa valoran la novedad, mientras que las personas ansiosas valoran la seguridad. La personalidad puede clasificarse en actitudes, autoestima, como el juicio que la persona hace de sí misma, bienestar, que también representa un rasgo de la personalidad, y tiene que ver con la parte subjetiva de la salud mental.
Personalidad jurídica
La personalidad jurídica es la aptitud para ser titular autónomo de relaciones jurídicas. Es inherente a la capacidad jurídica o de ejercicio de los derechos, y la capacidad jurídica y la capacidad de ejercicio de los derechos son conceptos distintos.
Personalidad esquizoide e histriónica
La personalidad esquizoide e histriónica son trastornos de la personalidad. En el caso de la personalidad esquizoide (que a menudo se confunde erróneamente con la esquizofrenia), la persona muestra poca disposición a relacionarse socialmente, y a menudo se aísla. El trastorno histriónico de la personalidad se caracteriza por una dramatización excesiva, una necesidad de ser el centro de atención y un comportamiento sexualmente provocativo.
